Visitar el Palacio de Versalles
Para los amantes del lujo, creemos que no hay nada comparable a visitar el Palacio de Versalles.
Si te vale nuestra opinión, dado que ya hemos podido visitar muchos palacios, detacaremos que en ninguno hemos encontrado la ostentación y la majestuosidad que tiene el Palacio de Versalles. Es más, parece increíble que siendo el lugar que inició el declive de la monarquía e hizo que estallara la Revolución siga estando en píe y aún te transporta a la corte de aquellos reyes y reinas que residieron en este gran palacio.
La historia del recinto
Un poco de contexto para poder imaginarnos quién vivía y lo que sucedía entre aquellas paredes que tantos secretos guardan.
El palacio de Versalles se encuentra alejado del centro de París y es que realmente este inmenso palacio empezó siendo un pequeño pabellón de caza de Luis XIII. Es por ello que quitando la villa, el resto de las inmediaciones en la zona son jardines y bosques. Lo que le da un gran aislamiento y tranquilidad.
Por este motivo, a finales del siglo XVII el pequeño pabellón de caza se convirtió en residencia real. Fue Luis XIV, el Rey Sol, quien trasladó su residencia y la sede del gobierno de París hasta allí. Desde entonces el palacio se fue ampliando para albergar la gran corte que tenía tanto él como los reyes posteriores que vivieron entre sus paredes.
Se crearon grandes salas, distinguidas estancias, lujosos dormitorios y por supuesto la famosa galería de los espejos. Todas estas mejoras hacen que Versalles sea el Palacio más majestuoso que ha existido. Sin embargo, Versalles no es únicamente el palacio principal.
Además del gran edificio principal, los reyes se dedicaron a crear una enorme zona ajardinada que termina en el Gran Canal de las barcas. Toda esta zona son Los Jardines de Versalles y fue diseñada con todo detalle para que los visitantes se pudieran perder por sus caminos y encontrarán espectaculares fuentes y grandes áreas de recreo formando un conjunto totalmente sorprendente.
Pero además a unos cientos de metros del palacio y los jardines, los reyes también crearon unos pequeños palacios llamados Gran Trianón y Pequeño Trianón para, por un lado, poder huir de las miradas de la corte y, por otro, ser residencia de algunos invitados importantes, de algunas amantes de los reyes o incluso de las reinas como fue el caso de la Reina María Antonieta.
Todo esto forma el Museo Nacional de los Castillos de Versalles y Trianon declarados por la Unesco Patrimonio de la Humanidad en 1979, uno de los 31 monumentos designados en Francia .
Cómo llegar a visitar el Palacio de Versalles
Para llegar a Versalles hay que hacerlo en tren. La línea C del RER llega hasta Versalles Rive Gauche, que es la parada más cercana a Versalles. Otra opción es llegar a la parada de tren de Versailles-Chantiers, que tiene mayor servicio de trenes. Considera ambas, al llegar podrás coger un autobús o andar durante 10-15 minutos casi en línea recta para llegar al Palacio.
Si eliges la opción de ir andando te recomendamos que hagas una parada en la Boulangerie Florence Poirier para comprar un croissant, porque será una jornada intensa.
Entradas
La entrada básica para visitar el Palacio de Versalles incluye acceso al Gran y Pequeño Trianón y también a los jardines de Versalles. También encontrarás entradas que incluyen un tentempié y otras que incluyen el alquiler de una bici o una barca.
Sin embargo os tenemos que avisar que la entrada a los jardines no está incluida todo el año. En los meses de mejor clima los jardines se activan un poco más y además de encender alguna fuente ponen música. En esta época si quieres acceder a los jardines tendrás que pagar obligatoriamente 10€ más por persona.
A nosotros nos pareció irritante no enterarnos hasta que quisimos entrar con nuestra entrada completa, pero una vez allí merece la pena pagar el extra y acceder a los jardines.
Lo primero que hay que decir es que no todas las áreas tienen el mismo horario de apertura. Los jardines abren a las 8:00, el palacio a las 9:00 y el gran y pequeño Trianón a las 12:00. Os dejamos los horarios por si hay variación.
Lo óptimo es reservar las entradas para ver el palacio lo más temprano posible, a las 9:00, así podrás ver el Palacio más tranquilo y luego pasar a los jardines y el pequeño y gran Trianón, pero si no consigues la primera hora, podrás organizarte la visita en otro orden que te deje aprovechar el día.
Museum Pass:
Si tienes la Museum Pass ya en tu poder o tienes pensado comprarla, también podrás hacer la reserva para Visitar el Palacio de Versalles. Desde la web del palacio, podrás elegir la entrada como si la fueras a comprar y una vez elijas la hora te dejará elegir entre entrada con precio o entrada gratis. Elige la opción a 0€ y presenta el día de tu visita la entrada junto con la Museum Pass para poder acceder.
Cuanto dura la visita
La visita, si eres de los que quiere aprovechar el día y ver todo, son en torno a las 5 horas.
Visitar el Palacio de Versalles con calma y detalle, te llevará mínimo 2 horas, la visita del Gran Trianón y del Pequeño Trianón te puede llevar alrededor de 1 hora y media y el resto del tiempo seguramente lo uses en recorrer los jardines, ver cada rincón y disfrutar de alguna fuente en funcionamiento.
Esta entrada te da la opción de visitar los jardines del gran y el pequeño trianón, pero eso ya lo dejamos a tu elección ya que no son jardines pequeños que digamos.
Aplicación y Guía para visitar el Palacio de Versalles
Para que puedas recorrer Versalles sin perderte un detalle, te recomendamos que te descargues la aplicación del palacio. Desde ella además de tener acceso a la compra de entradas, tendrás acceso a la información de las zonas más importantes del complejo.
Y lo más importante, en esta aplicación también se indica si el día de tu visita tendrás que pagar el extra de los jardines o están incluidos. Para saberlo tienes que ir a la sección de información y en la pestaña de horarios podrás elegir el día de tu visita. Al marcarlo se refresca la lista de horarios del complejo y aparecerá un icono en los jardines que indica si hay algún evento especial.
Comida
Ya que pasarás seguramente la hora de la comida en Versalles, te ccontamos que podrás encontrar una cafetería en la zona del palacio. También hay algún restaurante en la zona exterior en los jardines que lleva al gran y pequeño Trianón. Y por último una pequeña cafetería o restaurante en la entrada del pequeño Trianon.
Nosotros que siempre andamos con el tiempo justo para ver las cosas lo que hacemos es llevar comida preparada. Y justo en esta visita aprovechamos a comer en la entrada del Gran Trianón.
Visitar el Palacio de Versalles
El gran palacio de Versalles es la joya de la corona del complejo. Tanto es así que mucha gente hace visitas express para visitarlo, pero no accede al resto del complejo. No es para menos, porque si llegas andando desde la estación de tren ya de lejos impone.
Llegarás al palacio desde la calle principal por la que seguramente llegaban los invitados y desde lejos verás la gran explanada que precede a Versalles controlada por el gran Luis XIV.
Con las restauraciones que se han ido haciendo el palacio brilla como debía haber brillado cuando se inauguró y acrecienta la sensación de grandiosidad. Aunque por fuera se vea así, lo mejor está dentro.
En la planta superior de la estructura central se encuentran los aposentos del Rey y la Reina. Cada uno estaba ubicado en un lado de la estructura y uniendo estas dos zonas, se encontraba una gran terraza que daba a los jardines. Esta terraza terminó convirtiéndose en lo más llamativo del palacio, la galería de los espejos.
La galería era el lugar de reunión de los cortesanos con los reyes. Pero no era esta su única función, ya que en los detalles se puede observar la grandeza de la Francia de entonces. En el techo hay pinturas que representan las grandes victorias del ejército y los detalles de la galería como los espejos dan a entender el poder económico.
En paralelo a la Galería de los espejos, pero en el lado contrario a los jardines se encontraba la cámara del Rey. Una posición elegida por el mismo, porque era por donde salía el sol.
En las zonas exteriores del palacio, tanto en la planta superior como la inferior se pueden encontrar gran cantidad de salas que albergan obras de arte. Estas zonas se convirtieron en un museo de la historia de Francia donde podrás encontrar cuadros que muestran al rey en lo que era el pabellón de caza hasta escenas más actuales de los reyes en palacio. También episodios de las cruzadas y las batallas más importantes del reino. Incluso podremos encontrar una zona dedicada a las conquistas y el imperio de Napoleón.
Para convertir este humilde pabellón de caza en esta imponente estructura han hecho falta muchos desarrollos y grandes inversiones económicas. Todo ese dinero se recaba en su mayoría de los impuestos al pueblo, y finalmente, tanta ostentación, tantas fiestas y tanta gente viviendo en el más absoluto lujo en este palacio hizo que el pueblo se levantara y todo lo que estos 4 reyes habían construido acabara con la conocida Revolución Francesa de 1789.
Visitar los Jardines del Palacio de Versalles
Los jardines están diseñados acorde con el Palacio. En esta zona encontrarás una naturaleza tan trabajada que es un elemento más de decoración, y además los jardines esconden gran cantidad de esculturas y fuentes. Al pasear por los jardines verás que muchas de estás esculturas tienen un estilo parecido al de la Roma clásica.
Dentro de todas las fuentes que tiene el parque hay una serie de fuentes muy recomendables que no te puedes perder.
Consejos:
Si vas con tiempo suficiente, podrás encontrar muchas más fuentes “escondidas” en otros bosques que están menos visitados. No te de miedo salirte de lo establecido y cotillear.
Con la entrada a los jardines podrás entrar y salir 1 o dos veces, por lo que puedes aprovechar para visitar la zona del gran y pequeño Trianón cuando llegues a la fuente de Apolo, eso sí, no pierdas la entrada, ya que la necesitas para volver a entrar.
Fuente y parterre de Latona
Esta fuente es la que se encuentra bajando la escalinata que se encuentra frente la galería de los espejos. Esta fuente está basada en la infancia de Apolo, como no podía ser de otra forma, ya que es el dios romano del Sol.
Quizá la fuente como tal no te resulte especial, pero sí que lo es la imagen del conjunto de la fuente con toda la panorámica que desde lo alto de la escalinata se divisa. Desde aquí se puede tener una idea de lo grande que eran los terrenos de Versalles.
Bosque del Salón de Baile
Una de las fuentes que más nos gustan es este del Salón de baile. Y es que esconida entre los grandes árboles que separan las fuentes, podrás encontrar una pequeña grada que en realidad es la propia fuente.
Es una zona circular que en un lateral tiene como unas gradas por las que baja el agua. La fuente se llama así porque era un escenario donde se realizaban diferentes espectáculos de danza.
Piscina Espejo
Esta piscina no tiene nada visualmente especial, sin embargo si llegas en la época en que las fuentes están encendidas podrás ver un espectáculo de música y agua.
La Columnata
Aquí encontramos otra de las fuentes sorprendentes. La fuente en sí es una fuente de jardín normal, pero lo que te deja con buen sabor de boca es que está rodeada por una columnata de mármol
Fuente de Apolo
Esta fuente es la que marca el final del jardín y el comienzo del Gran Canal. Como no podía ser de otra forma esta fuente está inspirada también en el dios del Sol. En ella podemos ver a Apolo montado en el carro del Sol que emerge del agua tirado por caballos.
Bosque de Encélado
La fuente del Bosque de Encélado es más una escultura que una fuente, y a nosotros nos pareció muy bonita. En el centro de un estanque circular se ve la figura de uno de los titanes que fueron encerrados por haber intentado conquistar el Olimpo en la cultura grecorromana.
Bosque de los Baños de Apolo
Sin duda la sección del jardín que más nos gustó es el bosque de los baños de Apolo. No encontrarás solo una fuente. En esta sección podrás encontrar una pequeña gruta y unas cascadas que acaban en el estanque y donde además podemos ver caballos y unas ninfas cuidando del dios Apolo.
Bosque del teatro del agua
Aunque no se ha mantenido en la actualidad esta fuente tiene el nombre del teatro del agua porque aquí había unas gradas en altura. Lo que había en esta zona fue devastado por varios temporales y lo que se puede ver ahora es una pieza contemporánea compuesta por 3 fuentes de cristal de murano móviles que intentan recordar a los bailes celebrados en palacio.
Fuente de Neptuno
La fuente de Neptuno es la más grande de las que tienen espectáculo de agua y música.
Visitar el gran Trianón
Este pequeño palacio fue encargado por Luis XIV para descansar del trajín del palacio. El nombre de Trianón se debe a que el Rey destruyó la antigua villa que había en esta zona y que se llamaba así. Después de eso, en unos meses estaba construido este palacete. En principio se hizo de porcelana, pero por su fragilidad se terminó haciendo de mármol rosa.
El Gran Trianon ha sido residencia del propio Luis XIV, de Napoleón y del general de Gaulle entre otros. Y además se han alojado mandatarios extrajeros como Nixon (presindente de los Estados Unidos) o Isabel II (Reina de Inglaterra).
Visitar el pequeño Trianón
El pequeño Trianón se encuentra a unos pocos metros del Gran Trianón, pero su construcción no fue simultánea. Este pequeño palacio fue mandado construir por Luis XV, pero no como residencia, si no que empezó siendo un zoológico, un invernadero y una escuela botánica.
Con el paso de los años, la mujer de Luis XVI, María Antonieta, convirtió el pequeño Trianón en su residencia. Para sentirse más agusto, Maria Antonieta creó un teatro y convirtió el invernadero en un jardín de estilo Inglés, lo que le da un aire diferente a esta zona del complejo.
El jardín inglés del pequeño Trianón por petición de María Antonieta esconde una pequeña aldea, llamada Aldea de la Reina. Esta aldea estaba compuesta por un conjunto de cabañas de madera y un estanque. La aldea que vemos ahora es la 3ª reconstrucción que se ha hecho desde que la construyeron.
Dónde alojarse
Si después de conocer un poco más Versalles has decidido quedarte a dormir aquí, te dejamos un listado con los mejores hoteles cerca el palacio de Versalles.
Mapa
Consejos
- No te olvides de mirar la previsión del tiempo antes de visitar el Palacio de Versalles y llevar un paraguas si hay opción de lluvia. Si haces la visita completa en los jardines hay pocos sitios donde esconderse del chaparrón.
- Aprovecha a reservar la entrada a primera hora para poder hacer la visita con calma, así podrás descansar y hacer la visita a los jardines a otro ritmo.
- Si vas a verlo todo, vas a pasar muchas horas allí y eso incluye la comida, así evalúa si tienes que llevar algún tentempié. O si de lo contrario comes allí no te olvides que la hora de comida en Francia son las 12, y a esas horas te atenderán mucho más lento.